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Sobre los tejados o en los campos, los paneles fotovoltaicos se van haciendo hueco en nuestro paisaje. Optar por una instalación fotovoltaica es una excelente solución para asegurarse unos ingresos por la reventa de la electricidad producida. Esta elección también contribuye a la transición energética y a una economía más ecológica. Un gesto para su cartera y para el medio ambiente. A continuación, y con la colaboración de la empresa de placas solares Granada MLG Electrosolar le ofrecemos un resumen de los precios de esta solución para producir su propia electricidad.
La historia del panel fotovoltaico
Aunque el efecto fotovoltaico fue descubierto ya en 1839 por el físico Alexandre Edmond Becquerel, no fue hasta la aventura espacial cuando se vieron sus primeras aplicaciones concretas. La industria espacial desarrolló los primeros paneles solares fotovoltaicos para suministrar electricidad a los satélites.
La subida del precio del petróleo y los problemas medioambientales relacionados con los gases de efecto invernadero contribuyeron entonces al desarrollo de esta tecnología verde. En efecto, al transformar la radiación solar en electricidad, una célula fotovoltaica garantiza una producción totalmente desacoplada. Todo ocurre a nivel atómico: los fotones de la luz solar transmiten su energía a los electrones del silicio que componen la célula fotovoltaica, creando así una tensión eléctrica. Un panel solar es, por tanto, un conjunto de estas células conectadas en serie y en paralelo.
¿Cuáles son los criterios que definen el precio de los paneles fotovoltaicos?
Actualmente existen 3 tipos de paneles fotovoltaicos con rendimientos y costes muy diferentes:
Células de silicio amorfo: este tipo de célula se produce a partir de un «gas de silicio», pulverizado sobre metal, vidrio o plástico flexible. Aunque esta técnica es actualmente la menos costosa y permite fabricar paneles muy finos, también es la que ofrece la menor eficiencia (del 7 al 9%).
Células policristalinas: están hechas de un bloque de silicio multicristalino. Con un coste de producción intermedio y un rendimiento medio (del 11 al 15%), ofrecen una buena relación calidad/precio.
Células monocristalinas: se trata de una célula fabricada a partir de un bloque monocristalino de silicio. Los paneles monocristalinos son los que ofrecen la mejor eficiencia en la actualidad (del 14 al 18%). Complejos de producir, estos paneles son relativamente caros.